Cuando hablamos de la mujer dentro de los textos veterotestamentarios nos podemos llegar a sorprender de los papeles protagónicos-ministeriales que desarrollaron diversas mujeres. La mujer israelita realizaba trabajos en el hogar, cuidado a sus hijos, trabajos en el campo como Ruth, Rebeca y sus hermanas que cuidaban los animales en el campo, también podemos ver a la mujer en la cocina preparando alimentos para toda la familia y tejiendo desde el amanecer como la mujer virtuosa. Sin embargo, esto no significa que no hubo mujeres que ejercieron liderazgo y trascendieron en su tiempo. Recordemos a diversas mujeres que han dejado un gran legado en la historia hebrea por su liderazgo.
Miriam: Profeta de Israel
Miriam es conocida como la hermana mayor de Aarón y Moisés. Ella es reconocida como profeta, “la primera mujer profetisa en la Biblia, Miriam, surge en un contexto de explosión de alegría cuando Israel se ve libre de la persecución de los egipcios (Ex15).[1] Miriam se nos presenta como una joven nacida en un hogar israelita durante los años de servidumbre de la nación de Israel en Egipto. Es conocida por ser la doncella que cuidó la arquilla de juncos en la cual el niño Moisés viajo por el río Nilo y estuvo asociada con sus dos hermanos en la liberación que Dios hizo a su pueblo Israel.
Es impresionante como por medio del profeta Miqueas cuando Dios le recuerda a su pueblo la liberación pasada dice así: “Porque yo te hice subir de la tierra de Egipto; y envié delante de ti a Moisés, a Aarón y a Miriam” Miqueas 6:4. Así que Dios no solo escogió a los dos hermanos, sino que Miriam también fue enviada por Dios, ella tuvo parte en la liberación de Israel de la esclavitud. ¡Qué gran honor para Miriam! También leemos sobre Miriam en Éxodo 15:20-21:
Y María la profetisa, hermana de Aarón, tomó un pandero en su mano, y todas las mujeres salieron en pos de ella con panderos y danzas, Y María les respondía: Cantad a Jehová, porque en extremo se ha engrandecido; Ha echado en el mar al caballo y al jinete.
En Miriam tenemos la primera de una larga serie de mujeres religiosas que son presentadas en la Escritura como mujeres que ejercieron un oficio ministerial en su tiempo y trascendieron como mujeres usadas por Dios. Mujeres líderes que Dios levantó para su servicio y cumplieron el llamado ministerial de Dios para sus vidas.
Las hijas de Zelofahad: Mujeres que hicieron historia
Ahora conoceremos a cinco hermanas que cambiaron la historia del pueblo de Israel. Ellas nos enseñan el rol tan importante que han tenido las mujeres. Les invito a conocer a cinco mujeres atrevidas y extraordinarias que retan hoy a las mujeres a levantar sus voces. Estas cinco hermanas las encontramos en Números 27:1-4 y Josué 17:3-4.
Vinieron las hijas de Zelofehad hijo de Hefer, hijo de Galaad, hijo de Maquir, hijo de Manasés, de las familias de Manasés hijo de José, los nombres de las cuales eran Maala, Noa, Hogla, Milca y Tirsa; 2 y se presentaron delante de Moisés y delante del sacerdote Eleazar, y delante de los príncipes y de toda la congregación, a la puerta del tabernáculo de reunión, y dijeron: 3 Nuestro padre murió en el desierto; y él no estuvo en la de los que se juntaron contra Jehová en el grupo de Coré, sino que en su propio pecado murió, y no tuvo hijos. 4 ¿Por qué será quitado el nombre de nuestro padre de entre su familia, por no haber tenido hijo? Danos heredad entre los hermanos de nuestro padre.
La biblia nos relata de un hombre llamado Zelofehad, que sólo tuvo niñas, cinco niñas muy particulares, sus nombres eran Maala, Noa, Hogla, Milca y Tirsa. El capítulo 27 del libro de números inicia la historia exponiendo la genealogía de Zelofehad y sus cinco hijas. Teniendo en cuenta que algunas mujeres de la Biblia son presentadas sin nombre, es interesante como el autor de números se dedica a mencionar el nombre de cada una de las hijas de Zelofehad.
La dinámica en esta narración es la distribución de tierra en el pueblo de Israel. Se aborda el problema de la falta de un heredero masculino y se establecen las normas sobre el derecho de la herencia. La intención de estas hermanas en subrayar que su padre no era peor que otros miembros de la generación del éxodo y no merecía ser privado de su identidad entre los clanes que integraban al pueblo de Israel.
Características de la ley de Heredad
La ley tradicional decretaba que solo los hijos varones tenían derecho a la herencia y que el hijo primogénito debía de recibir una porción doble de la herencia familiar (Dt. 21:15-17). Las hijas de Zelofehad estaban preocupadas acerca de sus derechos a una herencia y la preservación del nombre de su padre sobre la tierra (ver.4). El caso de estas cinco hermanas explora las implicaciones de hijas israelitas que están pidiendo la heredad de sus padres. La familia patriarcal hebrea no se concebía sin hijos, existía una utilidad inmediata ya que los hijos ayudaban al trabajo, además desde su concepción social, la mayor desgracia no era vivir sin hijos, sino morir sin dejarlos.[2]
Situación de estas mujeres
La sociedad en que nacieron y crecieron estas mujeres era patriarcal, dirigida por hombres. Esta no fue la intención de Dios cuando creó a Adán y Eva, pero el pecado corrompió todo. Las cinco hermanas llegaron a conversar con Moisés, los príncipes y los sacerdotes, a pedir heredad entre los hermanos de su padre. El contexto social de la historia nos ayuda a entender que no fue nada fácil para estas mujeres tomar esa decisión.
Debido a que el derecho de heredad era otorgado exclusivamente a los varones y su padre sólo tuvo niñas, cuando llegara el momento de la repartición de la tierra entre las tribus de Israel, a ellas no les correspondía heredad. Ellas conocían la ley establecida, sin embargo, decidieron llenarse de valor y presentarse delante de Moisés y toda la congregación, se dispusieron a hacer algo inconcebible en su época. Moisés como buen líder, no mostró prejuicios injustos, no las juzgó. Moisés antepuso la justicia a la ley y llevó el caso delante de Dios, era Él quien tenía que decidir este asunto, no Moisés.
Leamos nuevamente la respuesta de Dios. vrs. 7-11
Dios mismo apoya a las hijas de Zelofahad. La respuesta de Dios es sorprendente y maravillosa, vrs. 6 y 7. Dios dijo: “Moisés escucha a esas mujeres y sus reclamos, son justos, tienen derecho a su herencia, he visto su determinación, su valentía, están reclamando lo que les pertenece, ni más ni menos, ¿por qué no dársela?”. Dios sale como su defensor y le da nuevas órdenes a Moisés y cambia las leyes de heredad. Esta fue la primera apelación en la Biblia proderecho de la mujer. No estoy hablando de feminismo, estas mujeres se atrevieron a confiar en Dios como el defensor de su justa causa y Dios les concedió su petición. Estas mujeres presentaron un espíritu de confrontación ante la injusticia.
Hasta ese momento la narración es impresionante, pero aún no se había repartido la tierra. Estas mujeres actuaron de manera precavida, pero ¿Qué pasaría cuando llegara el momento de repartir las tierras? Posteriormente en Josué 17:1-4, observamos que ya Moisés ha muerto, el líder del pueblo es Josué y se nos narra la repartición de la tierra en la tribu de Manases que es la tribu de Zelofehad. ¿Se atreverían ir otra vez ante los líderes a recordarles lo que Dios había dicho?
Pero Zelofehad hijo de Hefer, hijo de Galaad, hijo de Maquir, hijo de Manasés, no tuvo hijos sino hijas, los nombres de las cuales son estos: Maala, Noa, Hogla, Milca y Tirsa. 4 Estas vinieron delante del sacerdote Eleazar y de Josué hijo de Nun, y de los príncipes, y dijeron: Jehová mandó a Moisés que nos diese heredad entre nuestros hermanos. Y él les dio heredad entre los hermanos del padre de ellas, conforme al dicho de Jehová. Josué 17:1-4
Ellas llegaron delante del sacerdote Eleazar, de Josué hijo de Nun, y de los príncipes. En esta ocasión el argumento que usaron no fue su padre, sino la palabra dada por Jehová a Moisés. Dijeron: Jehová mandó a Moisés que nos diese heredad entre nuestros hermanos. Una vez más se llenan de valor y van a los líderes, y con el mejor respaldo que podían tener, “Jehová había ordenado que se le entregase heredad.” ¿Quién se atrevería a desobedecer una orden dada por Jehová? Josué como buen líder, las escuchó y debió haber recordado la palabra que Jehová había dicho a favor de las hijas de Zelofehad. En obediencia Josué les entregó heredad a ellas entre los hermanos de su padre, conforme al dicho de Jehová.
Conclusión:
La historia de Miriam nos lleva a reflexionar que si el silencio absoluto de las mujeres ante los hombres fuera la regla establecida en la Sagrada Escritura su canto de júbilo junto a las mujeres hubiese sido algo impropio y fuera de lugar. La historia de las hijas de Zelofehad demuestra una vez más que Dios no hace distinción en usar mujeres y hombres. Si estas mujeres hubiesen aceptado lo establecido en la ley, su historia no estuviera en la Escritura. La acción de ellas favoreció a todas las hijas de Israel que no tenían hermanos en la familia. Gracias a ellas ninguna israelita se quedaría sin tierra.
[1] Teresa Cavalcanti, “El ministerio profético de las mujeres en el Antiguo Testamento” en El rostro femenino de la teología (San José: Editorial DEI, 1988), 43.
[2] Elena Vazquez, Caminemos Juntas (Guatemala: Editorial Punto Creativo 2017), 53.
Más sobre la Dra. Elena Vásquez
La Dra. Elena Vázquez González es Directora de Grado en el Seminario Teológico Centroamericano (SETECA), y profesora de Teología e Historia.
Posee una licenciatura en Teología, con énfasis en Biblia y Teología del Seminario Teológico Centroamericano, (2008); una maestría en Teología del SETECA (2011), Pensum cerrado de la Magister Theologiae en Teología 2017 y un Doctorado en Ministerio de Dallas Theological Seminary (2021).
NLa Dra. de nacionalidad cubana, actualmente reside en Guatemala desde el año 2005. Es Directora de Grado en SETECA. Madre de Melodee Moreno Vázquez 13 años y Raúl Moreno Vázquez de 11 años. Además, es conferencista internacional, exponiendo temas pertinentes para mujeres, familias y capacitación a docentes.
también es autora de varios libros tales como: Mujer eres Especial, te invito a descubrirlo, 2014, Caminemos juntas, 2017, Mujer es tiempo de Trascender, 2018 y El divino Goel, 2019.
Además, ha escrito artículos para el Periódico la Palabra y reseñas para manual dirigidos a mujeres. Desde el año 2011 tiene un espacio en la emisora radial Guatemalteca, TGN, donde es conocida como Elenita la Cubanita y también en MCA-Radio.